Chacarera Simple: Alma y Tierra de Nuestro Baile
La chacarera simple es más que una danza: es el latido de la tierra santiagueña hecho música. Nació al calor del monte, entre guitarras criollas y bombos legüeros, en esas reuniones donde no hacía falta más que un patio de tierra y ganas de zapatear.
Cuentan los viejos que esta danza floreció allá por el siglo XIX, entre cosechas y fogones. De ahí su nombre, porque era la manera de celebrar la vida del chacarero. Acompañada por el ritmo alegre y marcado del bombo, fue pasando de generación en generación, manteniéndose firme como árbol de quebracho.
Hoy, la chacarera simple no se baila sólo en Santiago del Estero: cruzó montes, ciudades y hasta fronteras. Es bandera de nuestra identidad folclórica, y cada vez que suena, las piernas se encienden solas.
¡Es Hora de Bailar
la Chacarera!
Cuando el bombo suena y el violín se despereza, el cuerpo ya sabe lo que viene: ¡a zapatear chacarera, paisano!
Esta danza se baila de a dos, con picardía y elegancia. No hay contacto físico, pero sí mucha conexión. Te cuento cómo se arma esta fiesta de pasos:
Avance y retroceso
Cada bailarín avanza dos pasos hacia su pareja (1er y 2do compás) y luego retrocede dos pasos a su lugar inicial (3er y 4to compás).
Duración: 4 compases
Giro
Cada integrante gira sobre su eje (hacia la derecha o izquierda, según se haya ensayado) en su lugar, haciendo un giro completo en cuatro tiempos, sin desplazarse.
Duración: 4 compases
Vuelta Entera
La pareja se desplaza en círculo uno alrededor del otro, sin perder la orientación ni cruzarse. Ambos terminan en su posición original, pero habiendo girado alrededor del compañero.
Duración: 8 compases
Zapateo y zarandeo
El varón realiza el zapateo (con combinaciones de golpe, punta y taco) mostrando fuerza y ritmo.
La mujer ejecuta el zarandeo: camina en semicírculo mientras agita levemente la pollera con ambas manos. Se marca con elegancia y coquetería.
Duración: 8 compases
Vuelta Entera
La pareja se desplaza en círculo uno alrededor del otro, sin perder la orientación ni cruzarse. Ambos terminan en su posición original, pero habiendo girado alrededor del compañero.
Duración: 8 compases
Zapateo y zarandeo
El varón realiza el zapateo (con combinaciones de golpe, punta y taco) mostrando fuerza y ritmo.
La mujer ejecuta el zarandeo: camina en semicírculo mientras agita levemente la pollera con ambas manos. Se marca con elegancia y coquetería.
Duración: 8 compases
Media Vuelta
Ambos bailarines se aproximan con pasos elegantes recorriendo medio círculo (180°) para intercambiar de lugar, manteniendo el cruce de miradas y la conexión rítmica.
Duración: 4 compases
Áura (giro final y coronación)
La chacarera puede finalizar con un “aura”, que incluye un giro y una coronación simbólica, o con un giro final más simple en el centro de la pista.
Duración: 4 compases
La Chacarera, un Legado Vivo
La chacarera simple es una herencia que no se guarda en vitrinas, se vive bailando. Cada vez que sonás las palmas o levantás el talón, estás repitiendo un ritual criollo que une pasado y presente.
Y como buena tradición viva, no necesita escenario para brillar. Basta un patio de tierra, un fogón encendido y alguien que se anime a zapatear.
Así que si tenés alma campera o simplemente te pica el bichito del folclore, no dudes: aprendé una chacarera, sentila, bailala, y dejá que la tierra te marque el paso.